2.2 Plantamiento del problema

Para plantear un problema de buena manera, tenemos que hacer uso de tres elementos que son: los objetivos que pretendemos alcanzar, las preguntas que pretendemos resolver o que surgen y la justificación del proyecto de investigación

El primer paso para cualquier investigación es claramente establecer sus objetivos, de lo contrario la investigación no tendría un rumbo definido.  Las investigaciones buscan resolver un problema en especifico, lo que se debe hacer en esta fase es mencionar dicho problema y la forma de cómo la investigación que se esta realizando ayudará a resolverlo.
Los objetivos deben ser expresados en forma clara para que en todo momento se sepa con certeza a donde se quiere llegar; deben ser medibles, cuantificables para saber si en realidad se han alcanzado; del mismo modo deben de ser congruentes, es decir  deben ser susceptibles de alcanzarse, posibles.
Los objetivos de una investigación son las guías de la misma y se deben estar checando con frecuencia durante la investigación para evitar que la misma tome un rumbo diferente al planificado.
Los objetivos plasmados en una investigación deben estar dentro del mismo contexto, es decir, deben de ser congruentes entre sí.
Los objetivos en una investigación no son estáticos, durante la  investigación se pueden modificar los objetivos originales, se pueden cambiar por otros y si algunos hubiesen quedado obsoletos se pueden remover.